lunes, abril 16, 2007

La BSA de José María

Escribo desde Barcelona aprovechando un hueco en un viaje complicado. La verdad es que tenía abandonadas estas páginas a base de trabajo y líos ajenos a las motos.

Robregordo se acerca, el retorno a casa de la 247 Mk I también, y por el camino he aprovechado para envenenarme con una moto más. La preciosísima BSA B40 de José María. Justo: la que no salía en la foto de familia del trial de Las Rozas porque ya iba en el remolque. Podéis verla en la foto de abajo en una mañana de Domingo como deberían ser todas:


Recuerdo que cuando su dueño me empató a puntos con ella en las Rozas (y ganó por ceros) pensé que, además tenía el gran mérito de haberlo hecho sobre una moto mucho menos competitiva que mi 349/4. Y aunque siga pensando que mi Montesa es mucho más competitiva, probar la BSA ha sido toda una sorpresa.

Por bonita que resultara de aspecto esperaba una mecánica tosca y un cierto tacto a hierro. Y ni una cosa, ni la otra. La moto tiene una horquilla magnífica, un cambio de marchas preciso, y un motor que suena más redondo de lo que uno pueda suponer en una ancianita de este tipo. Y la dulzura al dar tracción es grande. Incluso con un neumático Pirelli de peor calidad que mis Michelín X11. Entiendo que en el barro de Las Rozas la cosa puede haber sido un factor positivo, y me encantaría poder probaarla en terreno deslizante. Sé lo etéreo que es hablar de sensaciones, pero el único modo en que puedo explicarlo es que la notas morder el terreno de otro modo diferente a como lo hace una 2T de gran cilindrada. Ambas tienen par motor para exportar, pero las sensaciones que producen son diferentes por completo.

Mucha moto para un piloto tan poco experto con ellas. Pero supongo que a poco que se me cruce una, la Norton no quedará como única angloparlante en el garaje de casa.

7 comentarios:

  1. Mal camino, compañero.

    Piensalo un par de veces antes de cometer una felonia de ese tamaño.


    Hasta el momento tenia un pase que dieras refugio a una sherpa y a dos ossas (en honor a la verdad diremos que están para lo que sirven, coger polvo), pero que se te pase por la cabeza meter en el mismo garaje una MKI y una kafetera inglesa...........amos, anda¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡.


    A.Corsino

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  2. Acaba de llegar la segunda Ossa a Madrid, justo estos días. Pero no la he visto porque estoy en Barcelona.

    Y lo de la BSA llevará su tiempo, amigo. Antes tendrás tu colección completa :-)

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  3. corsino, mala pécora, eso de la cafetera no me lo dices en la calle. ¿De quién es hija la tambores grandes si no de una inglesa?.

    Ese garaje recuperaría el señorío perdido tras la llegada de la macaco.

    Julián, me alegro que te gustara la tetera. Ya sabes, cuando quieras.

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  4. No me gustó, caballero. Me encantó. Y si Dios me da tiempo (y paciencia a mi mujer), acabará entrando alguna en casa.

    El único problema es que estuve dando una batida por ahí, y no vi nada remotamente parecido a la tuya. Ese chasis me tiene comida la moral. :-)

    Y para acabar de arreglarlo, hablando con Alfonso, me asegura que esas motos se pueden afinar mucho con un poco de paciencia.

    Que hay que probarlo, vamos ...

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  5. Lo dicho,


    " HAy gente pa tó "

    Corsino

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  6. Pues que no se me cruce a mi otra, que entonces seguro que me apunto yo también al trial de clásicas.
    Una preciosidad. Y una bonita manera de entrar en el mundo de las angloparlantes, como dice Julián.

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  7. Y de verdad, Agustín, una moto que enamora. Si Dios me da salud y tiempo, acabaré con una en casa.

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Como diría Juan Ramón Jiménez, mi troll es pequeño, peludo, suave; tan blando por fuera, que se diría todo de algodón, que no lleva huesos.

Probablemente no tiene huesos y por eso insulta bajo seudónimo. Pero además de cobarde es tan coñazo que he decidido que sólo me moleste a mi. De tal modo que a partir de ahora me quedo con la exclusiva de leer sus bobadas. Disculpadme el resto que os haga pasar por la "moderación" de vuestros comentarios.