lunes, marzo 26, 2012

Preparando los prototipos de encendido

Ha pasado poco más de un mes tras las primeras pruebas "reales" en Sant Cugat, con lo que quedamos este sábado pasado en Seseña para seguir trabajando en los prototipos del encendido.

No sé si habéis tenido la oportunidad de participar en un proceso de desarrollo de una idea que parte de cero. Pero es un proceso apasionante, donde sabes a qué punto quieres llegar, pero vas descubriendo cosas nuevas mientras recorres el camino ... y algunas ellas te hacen replantearte la historia entera, o una gran parte de ella. Si tenéis oportunidad, no dejéis de intentarlo. Especialmente, si la experiencia incluye trabajar con amigos que son tan solventes técnicamente como desde el lado personal. Porque así la historia se convierte en una especie de viaje compartido que la hace mucho más intensa y mucho más fructífera.

Y sin más prólogo, os cuento que el objetivo era dejar "casi listos" los diez primeros prototipos, y montados al menos dos motos más en estado de operación. Recordad que, de momento, la única unidad funcional era la Scorpion 250 de Ramón. Y las dos siguientes serían la Impala Sport 175 de Óscar y mi Impala 175.

El sábado por la mañana yo no pude estar porque tenía clase hasta la hora de comer, pero cuando me incorporé al laboratorio de Óscar a primera hora de la tarde, empezaron por ponerme los dientes largos con una demostración "en banco" del trabajo del encendido. Si miráis el vídeo, una de las curvas marca el punto de apertura, y la otra el desplazamiento del avance. Es impresionante ver cómo al acelerar empieza muy retrasado, pero se va moviendo hasta el punto de avance máximo que hemos estimado conveniente.  


Después de eso, estuvimos viendo el montaje de la plaquita con que sustituimos ya los platinos. Como comenté en una entrega anterior, lleva un sensor "Hall" que por medio de magnetismo determina el tiempo en que el circuito de encendido debe estar abierto o cerrado. La idea de compararlo con algo para que tengáis referencia del tamaño la dio José María. Está pensada para ir atornillado en el lugar de los platinos:


En la versión actual decidimos incorporar un led para poder comprobar (usando una pila de 9 voltios) la puesta a punto. Es curioso ver cómo el led enciende y apaga al pasar sobre el sensor el volante. Esto se consigue porque el sensor Hall es sensible a magnetismo, y dejamos dentro del volante magnético dos pequeñísimos imanes cuya función es abrir y cerrar el circuito. Se ve perfecto en el vídeo:


Y a partir de ése punto, empezamos a meterle mano a la Sport 175 de Óscar. En la foto, Ramón ejecutando lo que Óscar le dijo a su moto: "nunca más volverás a llevar un condensador". Entiendo que no es tan impresionante como lo de Hernán Cortés quemando las naves o César con lo del cruce del Rubicón y el "Aleja iacta est", pero no deja de tener su punto:


Aquí plano general del ingeniero jefe frente a la moto de Óscar.


Y, como no podía ser de otro modo, el momento en que la plaquita empieza a ser montada sobre el volante de la moto.


Y como nos gusta contar la verdad completa ... ahí descubrimos un pequeño secreto que desconocíamos: resulta que no puedes usar un stator Motoplat de Turismo con un volante de Sport ... ni al contrario. Y lo descubrimos después de la frustración que nos produjo la puñetera moto negándose a arrancar. No hacía chispa ni a tiros.

Hasta que estos dos locos de la electrónica descubrieron el porqué: la bobina de encendido en la Sport va enrollada al revés que en la Turismo. De modo que los imanes del volante van dispuestos de modo diferente en ambas motos ... y habíamos intentado montar el stator "Sport" de Óscar con un volante de broce procedente de un motor "Turismo".

Resuelta la cuestión, seguimos montando la caja del encendido en la moto de Óscar, que arrancó perfectamente, y donde el efecto del cambio de encendido convierte la moto en "otra cosa". Especialmente en bajo régimen y en medios. No hay picado de biela, da una suavidad fantástica y arranca perfectamente.


Ahora me falta probar la mía ... que no pude hacerlo porque les tuve que abandonar por un lío familiar insalvable. Espero poder hacerlo durante la semana y contaros algo.

Si todo va bien, y eso incluye las etapas de la "Vuelta a España", entramos en fase de optimización del diseño. Queremos hacerlo más compacto y más sencillo de instalar para que los clientes no tengan que hacer más que disfrutar tras un mínimo montaje.

Seguiremos informando.

domingo, marzo 04, 2012

Buscando la curva ideal para una clásica

Seguimos con el trabajo sobre el encendido. Ramón lleva ya unos doscientos kilómetros con la Scorpion, lo cual permite descartar fallos de diseño, y pasar a centrarse en la búsqueda de la curva ideal para el encendido. Y como estamos hablando de tecnología latina de los años 60, no se me ocurrían curvas mucho mejores que las de la foto ... que también es una clásica.


Pero como Ramón es ingeniero, considera que las curvas en Excel tienen más interés, y me manda la que de momento le ha dado un mejor resultado, que es la que os reproduzco abajo:



Con ella se consigue un arranque muy bueno, un funcionamiento suavísimo en bajos y una estirada estupenda a partir de 2.000 vueltas. En las 3.000 llevamos incluso más adelanto que una L.A. Cross, con lo que eso supone de potencia extra. Ojo ... y con un volante que no está en el mejor momento de imantación, que es parte de las limitaciones que nos hemos impuesto para asegurarnos de que funciona bien en todas las motos en que se instale.

Y si nada cambia demasiado, tiene pinta de que será precisamente esta curva (la de la foto de abajo) la que escojamos para distribuir las primeras diez unidades de preserie. Sólo faltará que los pilotos nos confirmen que están satisfechos con ella, para que sea la que pase a la versión comercial.

En paralelo estamos buscando nombre para el producto, diseño para el logotipo, y mirando qué cosas incluimos con el kit de instalación y qué cosas no ... aparte de encontrar a quien nos fabrique la primera serie y mirar qué costes tenemos y a qué precio podemos salir.

Os seguiremos contando. De momento seguimos muy ilusionados con el aspecto que va teniendo el proyecto.

Gracias por el apoyo.