martes, abril 12, 2022

Instalación eléctrica de la King Scorpion de Carlos (Y algunas claves para entender los esquemas eléctricos de Montesa)

 El sábado 9 de Abril nos escapamos de nuevo a la estepa con idea de volver a poner el motor en la moto de Carlos y empezar a trabajar con la instalación eléctrica. Y lo cierto es que tuvimos un buen avance pero que, sobre todo, aprendimos muchísimo sobre los esquemas eléctricos de estas motos y sobre por qué Montesa hacía las cosas de una determinada manera. Así que pensamos que valdría la pena contaros algunas de las conclusiones que hemos sacado.

A efectos de no volveros locos, y de que cada uno pueda dedicar su tiempo sólo a lo que le importa, dividiré la entrada en dos partes: lo que hicimos el sábado y lo que hemos sacado en claro del trabajo.

1.- Trabajos hechos con la moto de Carlos

En primer lugar nos metimos a enfundar los cables del stator. Recordad que la funda original estaba cuarteada y era una lástima chapucearla con cinta aislante. 

Y allí fue el primer pinchazo en hueso. Si os fijáis en las fotos de abajo, la primera de ellas muestra las cuatro salidas del volante (con colores muy desvaídos por el tiempo), la segunda el "torpedo" con el que intentamos guiar los cables a través de la funda negra de 8 mm que tenía en el taller (a través de la cual fue imposible pasar la guía con los cuatro cables) y la tercera, la funda gris de 12 mm por la finalmente optamos. Que ya sé que no es la original, pero que era la única alternativa viable y no queda mal en una instalación donde el resto del cableado de fábrica va en gris. 


Si os detenéis un poco en las imágenes, fijaos que la pieza de caucho negro que garantiza la estanqueidad en la entrada de los cables al compartimento del encendido la hemos dejado al final, porque resulta mucho más sencillo meterla sólo a lo largo de unos pocos centímetros que hacerla entrar desde fuera haciendo todo el recorrido de la funda.

Y en la segunda tanda de imágenes, también hay algún comentario que vale la pena tener en cuenta. Sobre todo, la primera de ellas donde se ve un bote de talco con el que embadurnamos los cables del encendido (y bastantes cosas más) para facilitar su camino a través de la funda. Mano de santo para quien no lo haya probado, y mucho más limpio que el detergente que usan a veces los electricistas en las instalaciones domésticas con tubo corrugado.  


En paralelo, Carlos estuvo mirando cosas por corregir y nos dimos cuenta de que uno de los espárragos que fijan la corona y su embellecedor al buje, estaba partido. Se aprecia bien en las dos primeras imágenes de la secuencia siguiente:


La solución no fue probablemente la más ortodoxa, pero quedó la mar de aparente: tomamos un tornillo M8 de longitud equivalente al espárrago, pasamos por la amoladora una de sus caras laterales para que asentara en plano por atrás, y pusimos una tuerca autoblocante blanca muy parecida a las originales. De hecho, la única diferencia a la vista es que la de serie es una M8 que necesita una llave de 14 mm, mientras que la sustituta es una M8 de 13, que es el estándar actual. Hay que mirarla muy fijamente para notar la diferencia.

A partir de ahí, lo que tocaba era devolver el motor al chasis ...

... y ponerse con la instalación eléctrica, que tiene todavía para un rato. Y aprovechamos para probar algunas cosas nuevas que dieron un resultado digno. Por un lado, las crimpadoras que se ven sobre el elevador en la foto central de la secuencia de abajo. Y por otro, uno de los conectores termorretráctiles con estaño en el centro que se ve (aunque muy mal) en la foto de la derecha prolongando el portafusible.



Si sois curiosos tal vez hayáis reparado en que estoy trabajando sin guantes, cuando más arriba me habéis visto usar los naranja de nitrilo diamantados (no conozco nada mejor como compromiso entre tacto y resistencia) y los Mechanix (para protegerme las manos al meter el motor en el chasis). Pues tiene su sentido, y es que manejar terminales y crimpar con los guantes puestos es un suplicio; y termina uno por preferir algo de suciedad y más precisión al trabajar. 

Y si seguís siendo más curiosos todavía, habréis visto un montón de cables de colores perfectos para reproducir la instalación original. Si a alguien le interesa, tal vez el modo más sencillo de conseguirlos es comprando una manguera de instalación de remolque, que las hay en 7 y 13 hilos de distintos colores. 

Así se quedó la moto, a la que no volveremos hasta pasada la Semana Santa. Pero como os decía arriba, en el proceso de intentar seguir el esquema original y validarlo con el de mi propia moto, hemos aprendido algunas cosas que os cuento en el apartado siguiente.

 

2.- Cómo equivocarse poco al reproducir el esquema eléctrico.

En primer lugar os dejo un esquema coloreado pero incompleto. Si lo miráis con detenimiento, los cables que entran en el piloto no están terminados de colorear, porque es imposible traducir los códigos "de forma" o "de patrón" con que Montesa emula los colores a los tonos correspondientes. Intentaré recordarlo y volveros a colgar la versión definitiva una vez lo hayamos terminado. Pero ahora necesito tanto la imagen general como algunas de detalle para enseñaros cosas.


Códigos empleados para identificar elementos de la instalación.

Como casi siempre pasa con Montesa, nada es casualidad, y hay claves en el dibujo que pueden pasar desapercibidas a quien lo esté usando. Os contamos las que tenemos claras:

  • Mangueras y fundas:

La primera marca significa que hay un tramo de funda donde se enfundan juntos un cable rosa y uno morado. Luego vemos cómo saber cómo deben empezar y terminar cada uno de los tramos en concreto. 
La segunda nos muestra cómo por una manguera muy gruesa transcurren cables de colores rojo, gris, amarillo, verde, azul, negro y blanco ... y cómo en un punto del recorrido se bifurcan hacia una manguera más estrecha el azul, el blanco y el negro. Concretamente es la que conecta el mando de luces con el faro y con el tramo principal de la instalación. Al final del artículo la podréis ver en la lámina de despiece del sistema eléctrico. 
La tercera, que es la del piloto y está sin colorear al 100%, nos da una pista importante, porque las flechas indican que hay una conexión faston al llegar al piloto.

 

  • Tipos de conexión del cableado


Las tres imágenes de arriba muestran, respectivamente el mando de luces y los interruptores de luz de freno delantera y trasera. Mirando las tres imágenes se aprecia perfectamente que unos cables terminan con un círculo (lo que indica que van atornillados) y otros en una flecha. Estas flechas indican conexión mediante un faston que será macho o hembra, dependiendo de si es su parte convexa o cóncava la que apunta al dispositivo. Hay que disculpar al autor de las nomenclaturas por no haber diseñado faston líquidos no binarios, pero imagino que todo se andará en este mundo de locos en que vivimos. 
Un caso especial es el de los faston con conexiones dobles (no sé si llamarlos "faston queer"), como el que se nos muestra en la bobina de alta:

 

La imagen representa que el faston hembra con que se conecta el cable azul al cuerpo de la bobina de alta recibe una doble entrada de cables: el que le llega desde el stator y el que puede ponerla a masa con la llave de contacto para evitar el arranque de la moto.

 

  • Correspondencias con el despiece de "Instalación eléctrica.

Otra pista que puede ser útil nos la proporciona el despiece de los elementos de la instalación que se muestra en la imagen de abajo.

A poco que lo miremos con atención se sacan conclusiones rápidamente, pese a que no vengan códigos de color que nos ayuden. Por ejemplo, las piezas 34.70.235, 236 y 037 son cortas y tienen un faston hembra y una conexión de anillo, como la 34.70.237 tiene ambas conexiones en anillo, lo cual nos conduce al entorno de la tapa lateral derecha desde donde se accede a la batería y la llave de contacto, cuyos contactos son con tornillos, como dedujimos más arriba. Se me ha ocurrido mirar en Ebay.com y me he encontrado con esto:


 

Un comerciante americano que aún tiene algunos conectores originales. Probablemente procedentes del stock del bueno de John Haberbosch que en paz descanse. Pero a los efectos que ahora nos interesan, nos vale para hacernos idea de cómo era la pieza que intentamos reproducir.

 

Y creo que por hoy está bien. Que no sé yo en qué medida estas cosas interesan a mi público, tan silencioso siempre. Que tengáis una magnífica Semana Santa.